La Hipoacusia es una perdida de la capacidad de audición. Si la pérdida auditiva es total se denomina sordera. Es muy importante tener un diagnóstico fiable y precoz ya que la audición es fundamental para que se produzca un correcto desarrollo del lenguaje.
CLASIFICACIÓN:
En función de la intensidad: puede ser leve, moderada o profunda.
En función del momento de aparición, puede ser prelocutiva o anterior al desarrollo del lenguaje o postlocutivas que aparecen cuando el paciente ya tiene un óptimo nivel de lenguaje.
En función de la zona del oído afectada, pueden ser de transmisión, neurosensorial o mixta.
PRÓTESIS AUDITIVAS
Para compensar la perdida auditiva existen varios tipos de prótesis que nos ayudaran a mejorar la capacidad de audición:
-AUDÍFONO: Se utiliza para pacientes con una hipoacusia neurosensorial leve- moderada. El audífono es un dispositivo que se coloca en el oído del paciente, amplificara los sonidos externos y no requiere cirujia.
-IMPLANTE COCLEAR: Se utiliza para pacientes con una pérdida auditiva profunda, cuya cóclea este dañada pero el nervio auditivo permanezca sano. Una parte va implantada en el oído del paciente y otra parte es externa. Este tipo de prótesis requiere cirujia.
Hay muchas señales que pueden alertarnos de que algo no va bien. En el caso de los bebes, cuando no reaccionan a sonidos fuertes o no emiten balbuceos es conveniente descartar un problema auditivo. Con niños más mayores, un signo muy habitual es la dificultad que tienen para discriminar palabras muy similares o para entender mensajes en ambientes ruidosos. Habitualmente este tipo de niños presentan dificultades a nivel articulatorio del habla. Ante cualquier duda lo mas recomendable es acudir al otorrino para que haga las pruebas pertinentes y en caso de hipoacusia acudir a un centro audiológico para que valoren la prótesis mas recomendable en su caso y posteriormente al logopeda para establecer el tratamiento más adecuado.